Soy Jane, una joven de 17 años que anhela y desea al Señor tanto que a veces peco tanto que me siento culpable y me arrepiento. Incluso he aceptado a Jesús como mi Señor y Salvador, pero siempre siento que no soy escuchada, como si no estuviera completamente en Cristo para tener una relación con él, o es que le hago demasiadas promesas vacías. Pero al ver a otros teniendo una buena y fuerte relación con él, al final del día no debería compararme, pero siento que todas las veces he lastimado tanto al Señor que ya ni siquiera le importa, pero probablemente sea mi pereza el problema y que no estoy dedicada.
Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo y nos perdonará nuestros pecados y nos purificará de toda injusticia.
Comentarios (3)
Join the conversation
Sign In to Comment