Quiero agradecer a Dios por mi salvación y mi nueva vida, por mi maravillosa esposa, por la liberación de las adicciones, por todo lo que tengo ahora. Gracias, nuestro Señor, por todo y por nuestra nueva vida. Gloria a ti, Señor, que sea eterna, Amén.
Por lo tanto, si alguno está en Cristo, es una nueva creación. Lo viejo ha pasado; ¡he aquí, lo nuevo ha llegado!
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