Solo quiero agradecer a Dios por la felicidad que me da, por la paz mental, por cómo me ayuda, por tener comida para comer, por tener padres amorosos, por estar cerca de Dios, por tener amigos maravillosos y una vida maravillosa, quiero agradecerte por otro día en esta tierra y por la oportunidad de predicar el Evangelio. Señor Dios, ¡gracias por todo!
Alégrense siempre, oren sin cesar, den gracias en toda circunstancia; porque esta es la voluntad de Dios para ustedes en Cristo Jesús.
Comentarios (0)
No comments yet. Be the first to comment!
Join the conversation
Sign In to Comment