Hace aproximadamente un año, tuve un fuerte encuentro con el Espíritu Santo y Jesús. Era un bebedor y fumador diario, y veía pornografía todos los días. Siempre he creído en Dios, pero literalmente vi cómo lloraba por mí. Hoy, llevo casi un año sobrio de alcohol, estoy en el día 3 sin fumar y en el día 5 sin pornografía. Siento como si la batalla espiritual hubiera terminado, pero la batalla con la carne está lejos de haber terminado. Por favor, oren por mí mientras me mantengo en el camino hacia Jesucristo y lucho con estos demonios mundanos.
Ninguna tentación os ha sobrevenido que no sea común a la humanidad. Y Dios es fiel; no permitirá que seáis tentados más allá de lo que podéis soportar. Pero cuando seáis tentados, también proveerá una salida para que podáis soportarlo.
Comentarios (1)
Join the conversation
Sign In to Comment