Estaba viendo un video sobre 3 de las historias más salvajes de las escrituras. La segunda era sobre el Levita y la Concubina. Un levita y su concubina estaban viajando por un lugar llamado Gibea. Y este lugar era conocido por ser peligroso. Como era de noche, un anciano se les acercó y les dijo que no deberían estar en ese lugar de noche. Así que el hombre y su concubina fueron a la casa y se quedaron allí para comer y dormir. Cuando de repente, una turba enojada y pervertida comenzó a suplicar tener relaciones sexuales con los hombres allí. Pero en lugar de enfrentarse a la turba de frente o decir que no, el levita ofreció a su concubina. Y esta concubina fue abusada y torturada toda la noche, mientras estos hombres dormían cómodamente en sus camas. ¿No somos nosotros así con el pecado? Hay personas afuera siendo torturadas y asesinadas por el pecado y, sin embargo, no les advertimos por comodidad. El ídolo más común es la comodidad y ni siquiera nos damos cuenta. El llamado a difundir el Evangelio no es "cuando haya leído toda la Biblia", no es "cuando haya comenzado en el ministerio a tiempo completo", es ahora. Ahora puedes decir, bueno, ¿qué pasa con las personas que disfrutan de su pecado? Bueno, sé que esto puede sonar extremo, pero ¿es posible que una mujer disfrute de una violación? Tristemente, lo es. ¿Aún salvarías a la persona de eso? Exactamente. Y no actúo como si fuera mejor, ya que esto es una advertencia para mí mismo. La comodidad lleva a la muerte espiritual.
Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado. Y ciertamente estoy con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.
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