Querido Padre Celestial,
Nos presentamos ante ti con corazones pesados, elevando a nuestro amado nieto que está experimentando dolor en la cadera. Oramos para que el consuelo lo rodee en este momento de incomodidad, y pedimos tu toque sanador para traer alivio y restauración a su cuerpo. Concédele la fuerza para soportar esta prueba y guía las manos de sus cuidadores mientras brindan tratamiento y cuidado. Que tu paz esté sobre él, y que experimente una pronta recuperación, volviendo a la salud y plenitud una vez más.
En tu misericordia y gracia, depositamos nuestra confianza, sabiendo que eres el sanador supremo. Amén.
Comentarios (0)
No comments yet. Be the first to comment!
Join the conversation
Sign In to Comment