Recientemente terminé mi relación porque ambos estábamos entrando en diferentes etapas de nuestras vidas y sentí que deberíamos aprovechar la oportunidad para explorar cosas nuevas. Ambos somos jóvenes y tenía miedo de ser demasiado joven para fijar mi corazón en una sola persona. Sin embargo, nuestra relación era perfecta y realmente creo que estábamos destinados el uno para el otro. Siempre lo he sabido, incluso cuando estábamos rompiendo, pero dejé que mis ansiedades sobre el futuro se interpusieran en el camino. Ha pasado un mes ahora y me doy cuenta de que he cometido un error. El tiempo que hemos pasado separados ha sido una confirmación para mí de que estamos destinados a estar juntos. Mi corazón está roto y no creo que vuelva a encontrar el amor con nadie más. Él está herido por mi partida y está perdiendo la esperanza de que tengamos un futuro juntos. Mi corazón me dice que todavía hay esperanza para nosotros. Por favor, oren por mí y ayúdenme a entender que si es parte del plan de Dios, así será. Por favor, ayúdenme a confiar en Su tiempo y permitirme salir de este lugar oscuro. Gracias.