Buenos días a todos. Estoy luchando por mantener la calma cuando me encuentro en una situación que me parece confrontacional. Acabo de tener un arrebato cuando mi gerente básicamente me acusó de negligencia laboral. Ahora me siento mal por no haber podido contar mi versión de la historia de manera calmada. Tenía razón, pero podría haberlo manejado mejor. Gracias por sus oraciones.
Mis queridos hermanos y hermanas, tomen nota de esto: Todos deben ser rápidos para escuchar, lentos para hablar y lentos para enojarse.
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