Comencé la universidad y tuve mi primera clase. Gracias a Dios fue tan buena y que hice una amiga, no sé si puedo llamarla así, pero la conocí y es una persona maravillosa, alguien con quien puedo hablar y salir. Estoy agradecido, mi mayor miedo era estar solo.
Dos son mejor que uno, porque tienen una buena recompensa por su trabajo. Porque si caen, uno levantará a su compañero. Pero ¡ay de aquel que está solo cuando cae y no tiene a otro que lo levante!
Comentarios (1)
Join the conversation
Sign In to Comment