Señor, te agradezco por otro día de vida que me has regalado. Gracias por Tu paz. Por la familia, por los amigos. Por los enemigos. Te agradezco por Tu misericordia hacia mí. Me bendices abundantemente y cada día veo Tu mano sobre mí. Estoy feliz, no tengo enfermedades, estoy lleno, tengo agua. Y te agradezco por todo. ¿Qué más necesito? ¿Realmente tienen sentido todas estas riquezas por las que nos esforzamos, nos harán más felices si no te tenemos en nuestras vidas? No retires Tu mano de nosotros, Te necesitamos🤲🙏
Todo buen regalo y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces celestiales, que no cambia como las sombras que se mueven.
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